El IRPF es una figura impositiva del sistema tributario español. Es el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, un gravamen de la renta obtenida en un año por las personas físicas residentes en España o contribuyentes.
Debido a la cantidad de dinero que recauda, actualmente es el impuesto más importante del sistema tributario español. Su ámbito de aplicación es a nivel de España, sin prejuicio de otros regímenes tributarios, tratados o convenios. No obstante, es un impuesto cedido parcialmente a las Comunidades Autónomas, por lo que estas pueden regular la tarifa autonómica y las deducciones propias de la cuota.
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¿QUIÉNES LO ABONAN?
Según el artículo 8 de la Ley 35/2006, el IRPF recae en las personas físicas que tengan su residencia habitual en territorio español o aquellas personas que tengan su domicilio en el extranjero por encontrarse en misión diplomática, oficinas consulares o institutos en el extranjero. Todas las personas físicas deben presentar la declaración de IRPF a excepción de:
- Rendimientos íntegros de ganancias patrimoniales y capital inmobiliario inferior a 1.600 euros brutos al año.
- Rendimientos de trabajo inferiores a 22.000 euros bruto al año si proceden de un único pagador o inferiores a 11.2000 euros si proceden de más de uno.
- Rentas inmobiliarias imputadas; subvenciones para la adquisición de viviendas de protección oficial y rendimiento de letras del Tesoro inferiores a los 1.000 euros brutos anuales.
ESCALA GENERAL A PARTIR DEL EJERCICIO 2016
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Fuente: Agencia Tributaria
